Me aterra no escribirte la palabra correcta,
sentir que tu imagen se inmaterializa,
se vuelve volátil, y se evapora entre mis manos.
Tus miradas tan cercanas,
parecían fragmentos de memorias viejas,
parecían incertidumbre disfrazada…
Pero la seducción de nuestra desinhibida piel,
y el quebrantamiento de nuestra razón,
ya hecha añicos en el suelo,
perforaron tus dudas
por aquellos instantes…
Entre el placer y la alucinación,
pude sentir toda mi sed de humanidad
saciada en tu cuerpo.
Mis labios peregrinos, no necesitaron
delimitar mas contornos,
si podían beber
de la inmortalidad de tus ojos…
Tus caricias ya no eran las metáforas
con las que plasmaba mi deseo,
ni tu bello cuerpo,
la alegoría que cada noche
me empecinaba a esconder
detrás de mis palabras…
de mis ideas…
Esta vez podía tocar te,
poseer el campo frutal
que era tu cuerpo,
volver a recorrer todas tus marcas,
tus caminos con olor a viñas en temporada…
No puedo desprenderme de tu imagen,
del agua que fluía lentamente por tu cuello,
que te probaba…
bajaba…
y besaba cada contorno de ti…
sentir que tu imagen se inmaterializa,
se vuelve volátil, y se evapora entre mis manos.
Tus miradas tan cercanas,
parecían fragmentos de memorias viejas,
parecían incertidumbre disfrazada…
Pero la seducción de nuestra desinhibida piel,
y el quebrantamiento de nuestra razón,
ya hecha añicos en el suelo,
perforaron tus dudas
por aquellos instantes…
Entre el placer y la alucinación,
pude sentir toda mi sed de humanidad
saciada en tu cuerpo.
Mis labios peregrinos, no necesitaron
delimitar mas contornos,
si podían beber
de la inmortalidad de tus ojos…
Tus caricias ya no eran las metáforas
con las que plasmaba mi deseo,
ni tu bello cuerpo,
la alegoría que cada noche
me empecinaba a esconder
detrás de mis palabras…
de mis ideas…
Esta vez podía tocar te,
poseer el campo frutal
que era tu cuerpo,
volver a recorrer todas tus marcas,
tus caminos con olor a viñas en temporada…
No puedo desprenderme de tu imagen,
del agua que fluía lentamente por tu cuello,
que te probaba…
bajaba…
y besaba cada contorno de ti…
tu humedad tenía sabor a menta…
Me aterra no poder llenarte con la frase correcta...
Me aterra no poder llenarte con la frase correcta...